
Psicólogo, aprende cómo la Terapia Online puede darte una remuneración justa, puede ayudarte a encontrar más pacientes/consultantes, puede facilitarte trabajar con tus pasiones y a beneficiar cada vez a más personas. La forma más noble y justa de ejercer, es emprendiendo. Y la terapia online es una excelente alternativa.
Emprendimiento y psicología.
Independientemente de la especialización. Ya sea emprender en psicología social, organizacional, clínica (sobre todo psicología clínica)… si bien no he podido encontrar estudios que respalden esta hipótesis, sí es el lema con el que me desenvuelvo como consultor de psicólogos emprendedores. Emprender en psicología es ayudar a más personas.
¿Qué es un emprendedor?

Un emprendedor es una persona con la facilidad de descubrir e identificar oportunidades de negocios, quien inicia un proyecto nuevo con el fin de generar valor a sus clientes y – en la mayoría de los casos – obtener beneficios económicos. Digo en la mayoría de los casos porque existe el emprendimiento social, el cual busca beneficiar a un grupo de personas de manera altruista. Es importante mencionar que el emprendimiento social también debe ser económicamente sostenible para ser exitoso, pero ese es un tema a tratar en otro espacio y en momento.
Por lo pronto, veo dos formas de emprender. A veces es necesario pasar por la primera antes de llegar a la segunda. Uno: buscar la creación de un autoempleo, en donde el emprendedor desarrolla un trabajo que le permite generar su propio sueldo más los gastos inherentes al proyecto mismo. Dos: emprender de manera que el proyecto no dependa del trabajo y presencia constante del emprendedor. En este último, las actividades se sistematizan para poder ser delegadas o realizadas mediante el uso de la tecnología.
En su momento leí una definición de una doctora en finanzas en donde describe de manera irónica el comportamiento de un emprendedor para definirlo. Explica exactamente lo que no debería ser, exalta algunas de las conductas erróneas y hace más claro para el lector las equivocaciones que a veces cometemos al iniciar un proyecto de emprendimiento. La comparto con ustedes a continuación:
Qué no debería ser un psicólogo emprendedor.

“…el emprendedor es una persona que necesita contar básicamente con su intuición (para elegir un número en que apostar), y esperar a partir de ahí que la suerte juegue a su favor. Para tener éxito, tiene que escoger “justo” el producto que los consumidores demandarán. ¿Piensa usted sus negocios de esta manera? Mucha gente lo hace: de hecho mucha gente también apuesta en el casino, aún con las probabilidades en contra. Como es sabido, el apostador puede salir favorecido en alguna vuelta, pero al final del día, la casa siempre gana.” (Roca, 2011).
Los emprendedores son quienes buscan “…ser los dueños del casino”. (Roca, 2011). Desarrollar un proyecto de emprendimiento implica tener un cúmulo de información multidisciplinaria y realizar una serie de actividades aparentemente ajenas a la actividad principal. El proceso terapéutico sería la actividad principal, en el caso de psicoterapeutas y llevar un récord de ingresos y egresos para la contabilidad es un ejemplo de esas actividades ajenas a la actividad principal.
Durante el desarrollo y manejo del proyecto “… pasan muchas cosas simultáneamente: el motor funciona, se crean nuevos clientes y se sirve a los existentes; giramos, intentamos mejorar nuestro producto, el marketing y las operaciones; y conducimos, decidiendo si pivotar y cuándo hacerlo.” (Ries, 2012). “Pivotar”, hace referencia a los cambios y adaptaciones de la estrategia cuando las cosas no van como se previeron en un inicio.
Importancia social del Psicólogo Emprendedor.

Desde un punto de vista personal, considero que existe una diferencia entre un emprendedor “genérico” y un psicólogo emprendedor. Nosotros, por nuestra formación, valores y visión del sobre el ser humano, en la gran mayoría de los casos contamos con la vocación de servir y ayudar a las personas. Esa fue la causa de que muchos de nosotros decidiéramos estudiar psicología.
Si existe la necesidad en el mundo de mejorar la distribución de la riqueza – que la hay -, de anteponer el bienestar social sobre el económico, de darle el valor ontológico a cada individuo y de mejorar la calidad de vida de tanto ellos como de nosotros como profesionistas; considero los psicólogos tenemos las herramientas par hacerlo y el deber moral para lograrlo. Para ello, sólo nos hace falta dar el paso hacia el emprendimiento y la sustentabilidad de nuestros proyectos. Lo demás ya lo traemos por nuestra formación.
Terapia online y emprendimiento.

La terapia online (o ciberterapia) se refiera a la “aplicación de una psicoterapia específica… en la cual la interacción paciente-terapeuta está mediada por herramientas tecnológicas de comunicación e información.” (Luque, 2009). Por lo tanto, la diferencia principal entre ésta y un proceso terapéutico presencial radica en el canal a través del cual se brinda el servicio.
Es cierto, la terapia online tiene sus limitantes en el proceso terapéutico. Algunas escuelas en psicoterapia las ven más aberrantes que otras. Sin embargo, la ciberterapia tiene muchas ventajas. Uno de sus beneficios principales es la cancelación de la distancia como barrera para llevar a cabo el proceso terapéutico. Centrarse únicamente en clientes conocidos o que se encuentren en las proximidades geográficas del terapeuta significa desperdiciar su principal bondad, en especial cuando existen clientes/pacientes potenciales alrededor del mundo. Claro, es importante tomar en cuenta las implicaciones éticas y legales que conlleva.
En algunos lugares el terapeuta está obligado a tener las licencias correspondientes para dar terapia online si el paciente/consultante se encuentra en su territorio. Si no recuerdo mal, es el caso de California, en EUA.
Modelo Canva en la terapia online

Haber dedicado la primer parte del artículo a la importancia de emprender en psicología es necesario para dar sentido a la segunda. En esta última, se aborda la terapia online como una sección dentro de un sistema dividido en módulos. Estos módulos representan características que afectan directamente nuestro ejercicio profesional. De ser tomadas en cuenta, se estará más cerca de proporcionar y captar valor mediante un trabajo sustentable.
Para conocer más a fondo estos módulos y cómo pueden afectar al desempeño integral de la terapia online desde un punto de vista de emprendimiento en psicología, sugiero visitar el artículo “Modelo de negocios para psicólogos” dando click aquí.
El contenido existente en este artículo se basa en el Modelo de Negocios Canva, (propuesta por Alexander Osterwalder en 2010). A continuación se mencionan los módulos, sin embargo te pido que leas el artículo antes de emitir juicio alguno. En ningún momento se incita a hacer cambios en la estructura de tu modelo de psicoterapia. Tú eres el experto en ello y nosotros no nos metemos en eso. Cuando se habla de contacto y relación con clientes/pacientes, se hace referencia a la actividad fuera del proceso terapéutico.
Módulos
- Segmentación de pacientes/clientes
- Propuesta de valor para tus pacientes/clientes
- Canales de interacción con tus pacientes/clientes
- Relación con tus pacientes/clientes fuera del proceso terapéutico
- Fuentes de ingresos
- Recursos clave
- Actividades clave
- Asociaciones clave
- Estructura de costes
Utilizar el modelo Canvas para brindar terapia online tiene la ventaja de dar al psicólogo emprendedor un panorama general de lo que ocurre alrededor de su proyecto. Además, brinda la posibilidad de plasmarlo y analizarlo de manera integral gracias a la facilidad de ser expresado en una sola página.
Requisitos para brindar terapia online.
Independientemente del giro en el que se trabaje, existen similitudes con respecto a las bases y fundamentos necesarios para llevar a cabo un proyecto de emprendimiento. De la misma manera, existen similitudes entre proyectos de emprendimiento digital, y la terapia online no es la excepción.
Sitio web como consultorio digital.

Contemplemos la siguiente premisa: Uno no construye casa en terreno ajeno. Psicoterapetuas con algunos años de experiencia posiblemente hayan vivido experiencias poco agradables con respecto a la renta de consultorios. Tal vez, en alguna ocasión, invirtieron dinero para arreglarlo y así poder contar con un lugar más agradable. Quizá, al poco tiempo los dueños decidieron dejar de rentar, incrementaron el precio de la renta o algo parecido. Aunque no siempre sea posible, tener un consultorio propio significa – por lo general – más tranquilidad para el terapeuta.
Lo mismo sucede en la terapia online. Aunque no existe un lugar físico, la actividad como tal puede llevarse a cabo en un sitio propio o de terceros. Al igual que con un consultorio físico, ser dueños del espacio – en este caso digital -, implica estar más protegido ante amenazas externas. Como cambio de políticas o de algoritmos de plataformas ajenas a nosotros, por ejemplo. Una ventaja de la terapia online sobre la terapia presencial (por llevarse a cabo la primera a través de internet), es el costo que implica ser dueño del espacio de trabajo. Un espacio digital en propiedad es significativamente más barato que uno físico.
Y, ¿cuál es el lugar digital al que se hace referencia? La respuesta es un sitio web propio. Desarrollarlo no significa que sea necesario renunciar en automático al uso de otras plataformas. Lo ideal es aprovecharlas y dirigir a los clientes al consultorio digital del terapeuta (a su página web).
Contar con un espacio digital propio tiene muchas ventajas. Entre las más valiosas (aparte de disminuir riesgos) es poder llevar a cabo estrategias de marketing digital para llevar clientes potenciales al consultorio virtual.
Marketing digital para beneficiar a más personas.

La profesión tiene mala reputación entre psicólogos, es cierto. Existe la percepción de que un mercadólogo sólo le importa vender, y que está dispuesto a engañar y hasta entregar a su mamá con tal de lograr su objetivo. Recordemos que así como hay psicólogos mal preparados y quienes no deberían estar ejerciendo, de la misma manera hay profesionistas carentes de principios éticos y estafadores en muchas otras disciplinas.
Así como se llega escuchar que es igual de efectivo ir con un psicólogo que platicar con un amigo, también existen estereotipos erróneos sobre otras carreras. Invito a dar una oportunidad a estos profesionistas para colaborar en tu proyecto. Es importante hacerlo con personas con quienes compartas valores, para no quebrantar la ética profesional ni el código de conducta del psicólogo en ningún momento.
El trabajo del psicoterapeuta se centra en generar valor a sus clientes y en ayudarlos; de una u otra manera. Ergo, entre más clientes consiga, mayor será el beneficio social que pueda aportar. Ese es el trabajo de las estrategias de mercadotecnia digital. A través del trabajo del terapeuta, ayudan a que los beneficios del trabajo del psicólogo lleguen a más personas, teniendo ventajas tanto para los clientes como para el terapétuta.
Para llevar a cabo dichas estrategias, no necesariamente se requiere contratar o trabajar con un mercadólogo. Sobre todo al inicio del proyecto, cuando el psicoterapeuta hace un poco de todo por la limitación de los recursos disponibles al momento de emprender.
El marketing no es el primer paso por andar.
El marketing es sólo uno de los pilares en proyectos de emprendimiento. Hay otras disciplinas involucradas y es imperativo tomarlas en cuenta, incluso antes de adoptar estrategias de mercadotecnia. Para que éstas mismas puedan funcionar, es necesario hacer trabajo previo en otras disciplinas. Un ejemplo es la planeación estratégica.
Será frecuente encontrar mercadólogos o expertos en marketing digital ofreciendo sus servicios, abundan en redes sociales y otros medios. Ellos son expertos en hacer publicidad, lo lógico es encontrar sus servicios con relativa facilidad. Existe la necesidad de construir cimientos sólidos para erguir un proyecto fuerte y duradero, y para ello, es necesario aprender a hacer otras cosas antes de iniciar campañas en Instagram, Facebook, antes de tomar un curso de copywriting, ventas y otras actividades similares.
Atraer pacientes/clientes al consultorio.

Una estrategia que funciona muy bien para atraer clientes al consultorio, tanto para uno físico como para el digital, es crear contenido gratuito para el público a quien se estará dirigido. Puede ser en formato escrito, mediante un blog; en video, para un canal de YouTube, Vimeo y redes sociales o en audio, para podcasts. El medio de entregar el contenido dependerá de la forma en que éste sea consumido por los clientes del micronicho seleccionado y de las fortalezas del psicólogo emprendedor.
La razón principal para solucionar problemas mediante la creación de contenido es demostrar que el terapeuta sabe del tema, que no es un charlatán y permitir a pacientes/clientes potenciales encontrarlo. No se puede contratar un servicio de quien no se sabe que existe.
Es condición indispensable que el contenido creado, aún siendo gratuito, sea de alta calidad y resuelva problemas reales de los clientes/pacientes potenciales. Esto genera confianza en el trabajo del psicólogo y fomenta que el paciente potencia decida contratar los servicios de quien conoce, aunque sea a través de un blog o un canal de YouTube.
Recomiendo al lector se informe sobre marketing de contenido (o inbound marketing) para profundizar en el tema. Ésta es una estrategia eficaz, sobre todo cuando no se cuenta con suficientes recursos económicos para hacer campañas de publicidad.
¿Qué se necesita para consultorio digital?
Dominio. La dirección del consultorio online

Ya se conoce la importancia de dirigir el tráfico generado por el contenido a la página web del terapeuta. Pero, ¿qué se necesita para tener una página web? Así como los pacientes necesitan una dirección para llegar a un consultorio, también necesitaran información para llegar a un sitio web. A esta dirección se le conoce como dominio, que es “el nombre único y exclusivo que se le da a un sitio web en Internet para que cualquiera pueda visitarlo” (Alonso, s.f.). Un ejemplo de un dominio es https://psicologoemprendedor.com. Otro, https://www.facebook.com.
Hosting.

Suponiendo que ya se encontró el nombre del dominio deseado y está disponible. El paso siguiente sería encontrar un lugar en dónde guardar toda la información que se genere. Toda la información debe estar guardada en algún lugar. Cuando se trabaja en la computadora y se hace una presentación en Power Point o una matriz en una hoja de cálculo, éstas pueden quedar guardadas en la memoria de la computadora o en una memoria usb. De la misma manera, toda información de las páginas web debe estar almacenada en algún lado. El servicio de almacenar información de páginas web se le conoce como servicio de Hosting (o alojamiento web), y hay muchas empresas que lo ofrecen. Por lo general, éstas – al contratarlo – regalan por un año el dominio.
Al seleccionar una empresa que brinde el servicio de Hosting es recomendable tomar en cuenta algunas características particulares. La primera, es la atención a cliente. Cuando uno inicia, desconoce términos y lo pasos necesarios para la creación de una página web. El servicio a clientes ayudará a que este proceso sea más sencillo.
La segunda característica importante son los respaldos y copias de seguridad. En casos de borrar información de manera accidental o de ser víctima de ciberataques, esta opción salvará mucho trabajo. En tercer lugar, se recomienda que la empresa tenga servidores de alta velocidad. Para ello es necesario que cuenten con Discos en Estado Sólido o SSD, por sus siglas en inglés. Y como cuarta característica, si el servicio está en español, puede facilitar un poco más el proceso de creación de tu consultorio online.
Gestor de contenido (CMS)

Originalmente, sólo quienes sabían de lenguajes de programación podían desarrollar una página. Hoy en día ya no es así, gracias a los sistemas de gestión de contenido (CMS, por sus siglas en inglés). “Un CMS es un software desarrollado para que cualquier usuario pueda administrar y gestionar contenidos de una web con facilidad y sin conocimientos de programación Web” (García, 2011).
Existen varios CMS´s y, dependiendo el objetivo del proyecto, habrá unos mejores que otros. La gran mayoría de proyectos digitales pueden dividirse en dos categorías. La primera, para páginas web; la segunda, para tiendas en línea. Lo que más nos conviene para terapia online es una página web, como se ha mencionando a lo largo del escrito, y el CMS que más recomiendo se llama WordPress.
WordPress.

Lo recomiendo porque es un sistema de código abierto, lo que significa – entre muchas otras cosas – que es gratuita su instalación y muchas de sus funciones, aunque no todas. “En los últimos años se ha producido un aumento exponencial de webs realizadas con este software, sustituyendo progresivamente a otros sistemas…” (Martínez, 2017). Existen numerosas ventajas de utilizar este CMS, Martínez (2017) enlista las siguientes:
- Facilidad de instalación.
- Facilidad de instalación de temas. Estos son “archivos que van a configurar el aspecto de tu web y cómo se disponen los elementos en las distintas páginas que la componen” (Lago, 2014).
- Facilidad de gestión.
- Constante avance tecnológico.
Utilizar WordPress y no requerir de programadores para hacer muchas cosas en una web hace que el desarrollo de las mismas sea más barato. No quiere decir que sea sólo para principiantes, ya que muchas organizaciones grandes y de prestigio lo utilizan. Por ejemplo: Spotify, People Magazine, Justin Bieber (en www.justinbiebermusic.com), Sylvester Stallone (en www.sylvesterstallone.com), BBC América Latina, Harvard Gazette, The Rolling Stones, entre muchas otras (Gobea, s.f.).
Y no es casualidad, ha existido un crecimiento constante del número de páginas web hechas con WordPress. En 2017, el 30% de las páginas web en el mundo estaban creadas con este CMS. Y en España en 2017, el 65% de todos los sitios web lo usaban también (Hill, 2017). En el mismo artículo, Hill describe a WordPress como la herramienta más usada, lo que se traduce en un mayor número de expertos dedicados a hacer páginas web usando este CMS, por lo tanto, contratar servicios de diseño y programación es cada vez más fácil y económicamente accesible.
Ok, pero ¿cuánto cuesta?

Se mencionaron ya algunas necesidades técnicas mínimas para las mejores prácticas de la terapia online en vías de convertirse en un negocio para psicoterapeutas, como el dominio, el Hosting, el CMS y brevemente se comentó la necesidad de contar con un tema para WordPress. Pero, ¿qué más se necesita y cuánto cuesta? En el sitio lifestylealcuadrado.com el consultor en marketing digital Franck Scipion tiene una sección en donde da las respuestas.
Para tener acceso a esta información es necesario llenar un formulario y darse de alta en una lista de suscripción. Si se llena con un nombre, un mail y se confirma la propiedad del mismo (dando click al enlace que se enviará al mismo correo), entonces se enviará la información en una hoja de cálculo. Aquí se explica qué y cuánto se necesita tanto para hacer un blog solo o un blog para vender un infoproducto.
El formulario puede ser completado en la página web siguiente: https://www.lifestylealcuadrado.com/cuanto-cuesta-crear-un-blog/. Las categorías en las que se recomienda invertir durante el primer año y sus costos son los siguientes:
Inversión necesaria según Franck Scipion.
- Dominio (9.82 €).
- Hosting o Alojamiento web (79.2 €).
- Tema de WordPress (96.8 €).
- Diseño de la página web (150 €).
- Thrive Leads. Plugin para email marketing (59 €). Los plugins “son aplicaciones o software que contienen un grupo de funciones o características, las cuales ayudan a mejorar WordPress”. (Tagle, 2014).
- MailChimp. Plataforma para automatizar envío de correos electrónicos para campañas de publicidad. Gratuita para los primeros 2000 suscriptores.
- Capacitación para emprender y para poder aprender a usar WordPress (150 € el primer año y 500 € los años siguientes).
*Los puntos anteriores pertenecen a Franck Scipion.
De manera personal, considero que los costos manejados por él pueden verse reducidos significativamente, sobre todo en la etapa inicial. Se recomienda empezar a trabajar con las características mínimas necesarias hasta saber si el proyecto es viable o no. Mientras esto sucede, los costos, aunque existentes, no son elevados.
Puede ser un poco más barato.
Ya se mencionó que (con en la mayoría de las empresas que ofrecen el servicio) el dominio es gratuito el primer año cuando se contrata el Hosting. Dentro de WordPress, existen muchos temas gratuitos que pueden ser utilizados mientras se valida la idea de negocio. MailChimp (plataforma para email marketing) es gratuita hasta los 2,000 suscriptores. De la misma manera, existen cursos de capacitación más baratos de lo que se describe en esta hoja de cálculo. Y, finalmente, no considero que en un principio sea necesario pagar por un diseñador web por las facilidades que da WordPress para tener un sitio estéticamente agradable y correcto.
Lo anterior sólo para el proceso de validación, cuando el proyecto apenas arranca. Una vez que el sitio comience a atraer pacientes – cuando se compruebe el interés de estos por el servicio y su intención de pagar por el mismo – entonces sí será el momento de invertir en desarrollo y muchas cosas más. Por supuesto, si se cuenta con los recursos económicos suficientes desde el principio, estos pueden ser empleados para acelerar el proceso; lo cual no significa que se recomiende saltar la validación del proyecto y desperdiciar los recursos. Si éstos son más restringidos, no pasa nada. Esto se puede contrarrestar invirtiendo tiempo para aprender a hacer las cosas mientras se genera lo suficiente para reinvertir.
Aunque la inversión económica es mucho menor que la necesaria para emprender de manera física en psicoterapia, ello no significa que sea gratuito. Aunque poco, pero es necesario contar con recursos para arrancar el proyecto. Si se tiene la posibilidad, aconsejo no escatimar recursos después de la validación del proyecto, sobre todo en capacitación. Es cierto que existe mucha información gratuita en internet, sin embargo, el proceso de filtrar la valiosa del resto toma mucho tiempo, tiempo que puede ser invertido de manera más eficiente.
Videoconferencias.
Mencionados ya los requisitos mínimos para tener una página web, hablemos de las características mínimas necesarias para el procesos de videoconferencia. Aunque ya han existido técnicas para brindar psicoterapia a distancia en el pasado (correo electrónico, chats, llamadas telefónicas), hoy en día parece ser más común las videollamadas gracias al acercamiento que permite internet y la posibilidad de observar (aunque con sus limitantes) el lenguaje no verbal de los consultantes/pacientes. Por eso la recomiendo sobre el resto.
Basándose en una publicación en el sitio web de Skype, plataforma para realizar videoconferencias, la velocidad mínima de descarga para lograr una videoconferencia en H.D. es de 1.2 megabytes por segundo (mbps). Y la velocidad de descarga recomendada es de 1.5 mbps. (“ ¿Qué cantidad de ancho de banda necesita Skype?”, s.f.).
Aunque se recomienda estas velocidades, personalmente considero que la calidad de imagen es clave para la terapia online. Entre más del lenguaje no verbal sea capaz de captar el terapeuta, mejores resultados tendrá la sesión. Es por ello que recomiendo buscar una velocidad mayor. Cerca de los 5 mbps. de bajada, cuando menos.
Además de contar con internet decente, para las videoconferencias se necesitan:
- Computadora, teléfono móvil o tableta. Entre más grande sea la pantalla, más detalles podrán captarse del lenguaje no verbal del consultante/paciente.
- Micrófono.
- Audífonos o altavoces. Es preferible utilizar audífonos para evitar que se «vicie» el sonido.
- Cámara web.
- Plataforma de videollamadas. (Skype, Google hangouts, Zoom, FaceTime, Google Duo, etc.)
Como se puede observar, la videollamada per se no tiene mayor complicación. Hoy en día, con un teléfono inteligente de gama media pueden llevarse a cabo. Desde el punto de vista del emprendimiento, la plataforma y el proceso de conectarse en videoconferencia es lo de menos siempre y cuando haga su trabajo bien.
Si no se conocen las características de los clientes con quienes se desea trabajar, si no se tiene clara la propuesta de valor, si no se sabe qué canal usar para hacerla llegar a los consultantes potenciales el servicio, si no existe diferenciación del resto de psicoterapeutas… la práctica profesional y la ayuda que el psicólogo puede ofrecer se ve limitada. Independientemente si es terapia presencial o terapia online. Los esfuerzos para encontrar pacientes nuevos será como “intentar matar moscas a cañonazos”, como dice el dicho popular. Grandes esfuerzos que llevan a pobres resultados.
Hago una invitación al lector a incorporar otras disciplinas a su ejercicio profesional. A tratar de llevar el valor inherente de la psicoterapia a más personas por medio de la terapia online.
Y lo más importante; si encuentras atractivo el contenido, comparte y date de alta en psicologoemprendedor.com para encontrar artículos gratuitos de formación en emprendimiento ético para psicólogos. Porque:
Psicólogo, colega, ¡la forma más noble y justa de ejercer, es emprendiendo!
¡Hasta la próxima!
Julio César Cuevas Crisóstomo

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